Las fotografías de boda de Ramiro y Carolina son la demostración de que las bodas de los pueblos tienen mucha magia. Una boda llena de detalles muy personales para una pareja con una conexión espectacular, donde la música tuvo una gran importancia.
Después nos fuimos a celebrarlo al restaurante Pic-Nic de Pedrajas, donde las emociones y la diversión no faltó en ningún momento.
Sin duda un honor haber sido los fotógrafos escogidos para este día tan especial.